¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? [Romanos 10:14]

domingo, 15 de enero de 2012

Financiamiento

La obra misionera requiere de apoyo financiero por parte de los miembros de la iglesia para extender la obra y sustentarla.
Los recursos económicos que se destinan al Consejo Misionero son administrados de tal manera que no sean malgastados sino designados a aquellas obras, misiones y misioneros en la medida que lo necesitan.






Sostenimiento de misioneros:
 Los misioneros que están empleados a tiempo completo en este ministerio son dignos de su salario (1 Ti. 5:18). El Consejo Misionero es el encargado de procurar que aquellos que trabajan en la obra misionera reciban una aportación económica que les permita solventar sus necesidades básicas; de manera que puedan desarrollar su ministerio sin ningún contratiempo y confiar en la gracia del Señor para suplir las necesidades de sus siervos.




Formas de Aportar:
·  Mediante la oración
El Consejo Misionero, los misioneros y pastores que forman parte de la obra dependen de la oración de la iglesia más que de cualquier otra aportación que se pueda dar. Usted puede orar en general por el trabajo misionero o por alguna misión, misionero o necesidad en específico. También puede orar por alguna de las siguientes peticiones:
- Que el Señor abra puertas para la obra misionera (Col. 4:2-3)
- Porque la Palabra de Dios se proclame sin obstáculos (2 Tes. 3:1)
- Por valentía en los misioneros (Ef. 6:19-20)
 
·  Mediante aportaciones financieras no designadas
Las aportaciones no designadas son aquellas que no se destinan a cubrir una necesidad de las misiones en específico. Éstas pasan a formar parte del fondo general del Consejo Misionero quien determina hacia qué rubros serán destinadas para suplir las necesidades de las misiones de la manera más efectiva. Las aportaciones no designadas se emplean para solventar los siguientes gastos, entre otros:
- Sostenimiento de misioneros y sus familias. Nuestros misioneros dependen de las aportaciones de la iglesia para su sostenimiento mensual, de ahí que esta sea la prioridad del Consejo Misionero.
- Transportación y gastos de los misioneros en los viajes que se requieran.
- Gastos administrativos.

·  Mediante aportaciones financieras designadas
Las aportaciones económicas al Consejo Misionero pueden destinarse de manera expresa a cubrir alguna de las necesidades específicas de la obra misionera; en estos casos el monto de la aportación se designará al rubro para el cual está destinada. Existen diversidad de necesidades específicas en el campo misionero, algunas de las más apremiantes son las siguientes:
 
- Mantenimiento y remodelación de inmuebles
- Adquisición de recursos materiales para el ministerio
- Adquisición de material evangelístico (Biblias, tratados, libros, etc.)
- Adquisición de literatura y herramientas para la capacitación misionera.

·  Mediante el programa “Adopta un misionero”
Este programa permite aportar económicamente para el sostén de un misionero en específico. La dinámica del programa es la siguiente: una persona o grupo de personas aportan una cantidad mensual fija durante un periodo de tiempo específico (puede ser un año). Esta aportación se entrega o deposita a la cuenta del Consejo Misionero quien, a su vez, lo hará llegar al misionero para quien está destinado.
El donante puede tener comunicación vía correo electrónico o telefónica con el misionero, sin embargo, toda aportación económica se hará llegar a través del Consejo Misionero.

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